Estas van encapsuladas y pueden ser de cualquier tipo: gel, litio y ácido plomo.
Al ser empleadas en sistemas pequeños no superan los 250 A y eso es porque a partir de esta intensidad es más conveniente emplear el uso de acumuladores estacionarios. No obstante se están desarrollando nuevas baterías que en un futuro podrán también ser utilizadas para el uso doméstico.
Destacan principalmente por ser más económicas pero también menos duraderas.